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Mostrando entradas de julio, 2017
LAS MENTIRAS DEL HOMBRE BUENO 14-02-15 Se puede ser un hombre bueno de verdad, y mentir. La verdad ha estado demasiado sobrevalorada por la nefasta influencia del calvinismo. Además. Un filósofo diría ahora: Qué es verdad?, y ya la tenemos montada. Un hombre bueno puede (debe) mentir para proteger un bien mayor de un mal menor. Un hombre (o mujer) infiel debe mentir porque su principal obligación es proteger a su familia, y si no, no haberla tenido, habérselo pensado antes. Las mujeres, que casi siempre están al borde del ataque de nervios, quieren orden y calma. Y las llamadas mentiras piadosas, en ambas direcciones, hombre/mujer, mujer/hombre, pueden proveer esa necesaria calma. Nadie puede negar, es una realidad, que el hombre y la mujer están en estados evolutivos muy distintos. La mujer es superior evolutivamente, es una máquina más perfecta y más longeva. En cambio, el hombre es víctima de su condición: de su fuerza y de sus molestas hormonas, ya no